25 dic 2013

Magia, tal vez

Fue más o menos así. Como esas canciones de amor o esas películas románticas que nuevamente veo por las noches: todo fue mágico, o así lo sentía yo.

En algún lugar de mi alma o en mi corazón había amor, pero aún no lo lograba encontrar. De repente la fragilidad estaba a flote y el amor que sentía por ti era lo único que me sostenía y me mantenía en pie. Sin embargo, lo nuestro no mantenía ninguna relación con la realidad, todo solía ser alguna especie de fantasía o sueño; algo imaginario, una experiencia sobrenatural, un deseo de jamás despertar. A veces pensaba que no era necesario cerrar los ojos para saber que todo estaba bien; y por las mañanas, tampoco era necesario abrirlos. Y era la misma canción en inglés que nos gustaba cada mañana. Dos vidas compartidas, colores combinados, preguntas sin respuestas y respuestas sin preguntas, bellas palabras, besos en el alma.

En realidad, no era necesario esconder ni mostrar nada; habían memorias pequeñas pero especialmente eternas, recuerdos comunes de momentos especiales; y pudimos comprobar y darnos cuenta de que era posible y que por fin podíamos llegar al cielo. Porque así era y así es el amor, o eso que estamos sintiendo, que no queremos admitir; eso que tú no sabes que yo siento por ti.

Aunque no lo creas, he estado pensándote cuando ríes, reímos juntos y cuando me miras sin mirarme, cuando no dices nada, cada movimiento y cada palabra; he estado pensando en ti. Por eso, cómo explicarte esto; dime ahora, cómo decirte que te quiero y que tú me digas que también lo haces.

Pero en algún momento pasará, tal vez.

Por eso ya planeé todo, planeé lo nuestro: seremos espontáneos; escribiéndonos poemas, al darnos nuestro primer beso, nuestro primer abrazo y aun al mirar la luna que tanto nos gusta. Nos reiremos de cuando pensábamos que lo nuestro era imposible, y de los demás que pensaban lo mismo.Y me mirarás y me dirás lo que te gusta de mí y nos sonreiremos y nos amaremos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario